Cuando Nina Simone grabó esta canción en 1958 no se esperaba que llegase al puesto nº 5 de las listas de éxito del Reino Unido ¡32 años después!
De hecho, la canción no tuvo demasiado éxito en su momento, cuando se incluyó en el álbum Little Girl Blue (1958). Pero en 1987 un fragmento de la misma se incorporó en un anuncio televisivo y la canción empezó a ser escuchada en todas las emisoras.
Pero empecemos desde el principio:
La canción no es original de Nina Simone. Había sido compuesta mucho antes, en 1930, por Walter Donaldson (música) y Gus Kahn (letra), como tema para la película Whoopee! (en la que también se hizo famosa la canción «Makin’ Whoopee»). En la película, la interpreta Eddie Cantor, primero como black face, esto es, con la cara pintada de negro, y luego -ya sin maquillaje- en otra escena del mismo film.
La canción adquirió cierta popularidad y se convirtió en un estándar de jazz, siendo grabada, entre otros, por Harry James, Nat King Cole o Count Basie. Puedes escuchar unas cuantas versiones en la playlist al final de esta entrada.
Como he comentado, Nina Simone la grabó en 1958, para su primer álbum, titulado Little Girl Blue. La canción pasó un poco desapercibida, pues el gran éxito del disco fue la versión de “I Love You Porgy” de George Gershwin. «My Baby…» No se publicó como single hasta unos años más tarde, en 1962.
Esta versión de Nina Simone es muy especial. Comienza con una introducción muy característica al piano, con una sucesión de escalas descendentes. Cuando las oyes ya sabes de qué canción se trata. Curiosamente una introducción muy similar se oye en otro tema grabado mucho antes: “Chop Chop Boogie”, de Hadda Brooks (lo puedes escuchar también en la lista de reproducción del final).
Luego entra la batería, y la voz cálida de Nina… y, después de la segunda frase, un característico break, que se repite al final de otras frases más adelante. La instrumentación se limita a la sección rítmica: piano, bajo y batería -tocada con escobillas-, lo que aporta a la pieza un carácter muy íntimo, pero con muchísimo “swing”.
Como decimos, en 1987, de forma inesperada, un fragmento de la canción de medio minuto se utiliza como banda sonora en un anuncio televisivo de Channel Nº 5:
En este momento la canción se vuelve a publicar como single, y se convirtió en un éxito, llegando precisamente al número 5… de las listas británicas. Para muchos –entre los que me cuento- supuso el descubrimiento de una artista casi olvidada por el gran público.
Ese mismo año se popularizó un vídeoclip de animación en el que aparecía una Nina Simone gata de plastilina cantando la canción en un club nocturno. El vídeo es una monada:
Posteriormente las versiones de la canción se sucedieron: George Michael, Michel Bublé, Natalie Cole, Sophie Milman…
Igualmente, la canción se incluyó en otras películas, como Everyone Says I Love You (1996), de Woody Allen, con esta estupenda escena de baile:
(Curiosamente, la película de Woody Allen también incluye una versión de «Makin’ Whoopee»).
Os invito a escuchar esta y otras versiones de esta canción en la siguiente playlist: